Cuando se me planteó la posibilidad de realizar un mural cerámico junto a la biblioteca del I.E.S Pablo Picasso de Málaga, fue tal la emoción que sentí, que supe desde el primer momento que se convertiría en algo especial no solo para mi, sino para todos los que me acompañaban en esta aventura.
Se planteó un diseño cargado de color y alegría cuyo tema principal fue la visualización y agradecimiento por lo aportado a la mujer escritora.
Antes de presentar el proyecto al alumnado y al profesorado que me iban a acompañar, fueron muchos los días de decisiones, pruebas y técnicas que íbamos a emplear.
Fue muy importante formar a l@s participantes para que tuvieran claro como se iba a trabajar.
El primer paso consistió en ampliar el dibujo en la dimensión correcta para cuadrarlo con el tamaño de los azulejos. Todo un reto que mis queridos creativ@s lo consiguieron con su entrega.
Picar el diseño de cada azulejo resultó una tarea muy relajante y entretenida.
Para después repasar con lápiz ese contorno que nos serviría de separación para que los colores no se mezclasen.
Pero sin duda lo mejor de este proceso fue aplicar el color a los azulejos dibujados, todo un reto de concentración y diversión, donde las perillas eran lo más demandado cada tarde.
Por supuesto hubo tiempo para todo, para risas, confidencias, diversión...
Siempre en cada hornada, había mucha ilusión por descubrir cual había sido el resultado, y es que la cerámica es MÁGICA...
Poco a poco íbamos descubriendo ese trabajo en equipo. ¡QUE EMOCIONANTE!
Ya lo teníamos todo...tan solo quedaba montarlo...
Quedando un resultado impresionante:
Sólo puedo dar las GRACIAS a todos y cada uno de vosotros, a los que habéis participado en este precioso proyecto, cargado de ilusión, entrega y sobretodo ALMA.
